Hemos vuelto.
H y yo hemos vuelto a utilizar una de las RRSS para conocer a gente del ambiente liberal. No hace mucho que decidimos volver a entrar pero encontramos cosas con las que ya estábamos familiarizados, y otras que han ido degenerando (todavía más) a lo largo de estos años.
Todavía andamos picoteando por la interfaz, buscando nuevos perfiles y husmeando las cosas que son nuevas para nosotros. En esencia, lo que ha cambiado ha sido casi todo a peor: el mal rollo que me genera algo vinculado al ambiente liberal que está excesivamente monetizado sigue presente, y mucho más que antes.Evidentemente, todo el mundo quiere sacar tajada de este negocio, pero para mí es algo muchísimo más íntimo que todo eso que se propone: macroquedadas, eventos en locales de lujo o fiestas en puticlubs. Sí, suena sorprendente pero es así: hace unos años acudí a una fiesta en una “casa de citas” en pleno centro de Madrid, con habitaciones a las que podías subir con tu ligue (yo lo de las habitaciones lo vi en realidad bastante práctico, pero me fallaba ese pequeño detalle sin importancia de la discreción del local). Hubiera sido muy gracioso que alguien del trabajo que estuviera por la calle me hubiera visto entrar en aquel antro.
Pues todas esas cosas, para mi sorpresa, han ido prosperando. Hay gente que no tiene recursos y ha acabado dedicándose a esto como negocio. Incluso han hecho un llamamiento, no hace mucho, para participar en un rodaje dentro de un famoso local (me imagino que haciendo ganchillo, claro). Todo esto, a pequeña escala, no me parece mal, pero llega un punto en el que te desborda. No me ha importado nunca acudir a una fiesta para reencontrarme con gente del ambiente, pero he de reconocer que ha llegado a tal extremo que ya me echan para atrás ciertas cosas.Me da mucha pena ver que las cosas que realmente estaban bien, como las quedadas cerveceras, donde nos reuníamos por volver a vernos y echar unas risas y nadie sacaba tajada salvo el bar, ya se han quedado prácticamente en el olvido. Y lo que más pena me da, es ver cómo han sido sustituidas por algo mucho más frío y monetizado.
Rezo a Santa Rita de Casia, San Judas Tadeo, Santa Filomena y San Gregorio de Neocesarea, que según el internete son los santísimos patrones de las causas perdidas, para que nos devuelva algo de cordurita y seso, que falta nos hace.
Buen post!